MONS. GONZALO LOPEZ M.

MONS. GONZALO LOPEZ M.

martes, 12 de abril de 2016

EN VENEZUELA: ¡ DE CADA CUAL, SEGÚN SU CAPACIDAD Y CADA CUAL, RECIBA SEGÚN SU NECESIDAD !


 
Aproniano Larez

En El Evangelio se narra el encuentro de Jesús de Nazareth con un joven rico, en estos términos: “18 Cierto hombre rico] Le preguntó a Jesús: “Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?” 19 Jesús le respondió: “¿Por qué Me llamas bueno? Nadie es bueno, sino sólo uno, Dios. 20 Tú sabes los mandamientos: ‘No cometas adulterio, No mates, No hurtes, No des falso testimonio, Honra a tu padre y a tu madre.’” 21 “Todo esto lo he guardado desde mi juventud,” dijo el hombre.

22 Cuando Jesús oyó esto, le dijo: “Te falta todavía una cosa; vende todo lo que tienes y reparte entre los pobres, y tendrás tesoro en los cielos; y ven, sígueme.”(Lo resaltado en negritas, es mío) 23 Pero al oír esto, se puso muy triste, pues era sumamente rico.

24 Mirándolo Jesús, dijo: “¡Qué difícil es que entren en el reino de Dios los que tienen riquezas! 25 Porque es más fácil que un camello paseb] por el ojo de una aguja, que el que un rico entre en el reino de Dios.” 26 Los que oyeron esto, dijeron: “¿Y quién podrá salvarse?” 27 “Lo imposible para los hombres es posible para Dios,” respondió Jesús.

28 Y Pedro dijo: “Nosotros hemos dejado todo[c] y Te hemos seguido.” 29 Entonces El les contestó: “En verdad les digo, que no hay nadie que haya dejado casa, o mujer, o hermanos, o padres o hijos por la causa del reino de Dios, 30 que no reciba muchas veces más en este tiempo, y en el siglo venidero, la vida eterna.” (Lo resaltado en negritas, es mío) (Lucas 18:18ss)

Y según el testimonio de Las Primeras Comunidades Cristianas relatado en el libro de Los Hechos de los Apóstoles, aparece este testimonio: “Todos los que habían creído vivían unidos; compartían todo cuanto tenían, vendían sus bienes y propiedades y repartían después el dinero entre todos según las necesidades de cada uno. (Lo remarcado en negritas es mío)

Todos los días se reunían en el Templo con entusiasmo, partían el pan en sus casas y compartían sus comidas con alegría y con gran sencillez de corazón.

Alababan a Dios y se ganaban la simpatía de todo el pueblo; y el Señor agregaba cada día a la comunidad a los que quería salvar.” (Cap. 2, versículos 44 al 47).

De esta manera fue acogida por Los Discípulos, la enseñanza de Jesús y es la prueba de que es una práctica de amor expresada en la solidaridad, desde tiempos muy antiguos… Posteriormente y en un contexto distinto lo expresa Carlos Marx. Este mandato de Jesús y posteriormente axioma marxista, es acogido como uno de los ejes transversales en la Propuesta de la Revolución Chavista, Nuestro Socialismo de hoy y a la venezolana.

Pero esta enseñanza, testimonio y axioma, referido primeramente a las relaciones humanas es lo mismo que encontramos también en el testimonio de Los Pueblos Ancestrales y con la misma proyección Cristiana, referida también a la vida en general y a todo el ecosistema…(Rom. 8,19ss)

Partiendo de esta última afirmación y viéndonos en el espejo de a dónde nos ha llevado la explotación petrolera y sus consecuencias; en el contexto de Nuestra “R” de Rectificación y del Decreto de Emergencia Económica y Productiva pero teniendo en cuenta que las mayores fuentes de riquezas de Nuestra Patria, además de su gente, la constituyen su abundancia de aguas, sus bosques, su minería, deben surgir contenidos y formas nuevas como estrategias para el logro del uso más amigable posible de esos recursos, garantizando que de toda su abundancia, Venezuela DE, TODO lo que es capaz, PEEERO, al mismo tiempo garantizando, también, que RECIBA TOOODO lo que necesita… ¿Qué queremos decir con esto? Que en el contexto del III Objetivo del Plan Ley de la Patria se le pida a Nuestro Ecosistema toda su contribución para el desarrollo humanizante de la Patria pero que se le garantice, también, en el contexto del V Objetivo, todo cuanto le es necesario para su sostenibilidad…

Lo anterior debe, necesariamente, preverse y sobre todo cuando se tiene en cuenta que “nuestros socios” no son ningunos angelitos. Desde mi punto de vista eso plantea que en las comisiones de trabajo, por muy técnicas que sean, estén incorporados equipos humanos con la amplia visión y experiencia del trabajo ecológico y con profundo compromiso patriótico para que funjan de contralores bío-ambierntales.

Sólo de este modo podremos lograr que las extracciones en el Arco Minero de Guayana no se nos convierta en un búmeran con consecuencias peores que las que estamos sufriendo con el petróleo. Veámonos también en el espejo de Estados Unidos que priorizando la sustentabilidad económica y política cortoplacista mediante la extracción aberrante del petróleo, según especialistas de allá mismo, tiene un futuro, cercano, de muchos riesgos, que a simple vista podrían afectar a muchos pobladores y a la naturaleza en general.

La visión cristiana: coincidente con la de los Pueblos Ancestrales, es que lo más importante, O TAL VEZ LO ÚNICO, es que la extracción minera que se profundizará en Guayana, GARANTICE la SOSTENIBILIDAD DEL ECOSISTEMA PORQUE ESTÁ EN JUEGO LA VIDA… De l@s venezolan@s y de nuestro ecosistema.