MONS. GONZALO LOPEZ M.

MONS. GONZALO LOPEZ M.

miércoles, 28 de enero de 2015

"DE LA PALABRA PUTA, UNA CRUZ ROSADA Y LA GRUESA HIPOCRECIA"


No tendría mayor relevancia la polémica que se ha desatado en Quito estos días, sino fuera porque desnuda a los grupos: "pro-vida, sodalícios y opusdeianos" en su faz más farisaica.

Se han colocado unas 4 vallas en algunas partes de la ciudad en que se dice: "Si ser puta es ser libre y dueña de mi cuerpo, soy puta y que" y  sembrado un buen número de cruces rosadas en sitios donde se tiene la certeza que se cometió un  femicidio. A la vez que  da inicio  a una campaña de concienciación  y debate sobre este mal.  La iniciativa la toma una joven concejala, que llegó a ese puesto en la lista de un partido de la nueva derecha, buena cosa, hasta en semejantes grupos hay gente pensante. Pero la reacción de los "fundamentalistas", expresados en la "red por la familia y la vida", el "observatorio católico", "aci-prensa" y otros más, es en verdad indignante. No les importa la violencia y  muerte de las mujeres y la crueldad que sufren, no tienen ninguna trascendencia los huérfanos y mutilados por las agresiones; no, lo que les "escandaliza" es el uso de la palabra puta y que se use el símbolo de la cruz. Se desgarran las vestiduras y entran en estado de histeria, por ahí  Amparo Medina su vocera, desde el patio de la Conferencia Episcopal, clama contra tamaña "blasfemia". Se dirigen a Rafael Correa amparados en su conocido "conservadurismo moral" para que "frene" a las Ong-s que "financian estos actos"... en fin, por los misioneros que andan en las calles sabemos de primera fuente el monstruo que es la violencia contra la mujer, las niñas, los y las adolescentes, sabemos de qué lado está el Dios de Jesús y lo que ya les dijo a todos estos lefebrianos: SEPULCROS BLANQUEADOS.

Animo a la muchacha que se arriesga desde el municipio, en la lucha por la paz y la vida nos encontraremos. (Equipo de la Iglesia de a Pie.)

 



“No me callaré, así reciba críticas”
Entrevista - El Telégrafo / Carla Cevallos / Concejala de Quito e integrante de la Comisión de Género del Municipio capitalino

La semana pasada Cevallos arrancó una campaña contra la violencia de género; exige respeto a quienes la cuestionan.

Seis de cada 10 mujeres han sido objeto de algún tipo de violencia en el país y 7 de cada 10 en Quito. Con esas cifras la concejala Carla Cevallos justifica la necesidad de la campaña ‘No más cruces rosadas’ que lanzó a título personal el miércoles anterior. La campaña ha sido criticada en redes sociales por el eslogan que utiliza en 4 vallas colocadas en igual número de puntos del Distrito: “Si ser puta es ser libre y dueña de mi cuerpo, soy puta y qué”.

¿Ha sufrido violencia de género?

Claro, sicológica, y todas las mujeres sufrimos el acoso diario en las calles; damos un paso y recibimos esos piropos malcriados, que es un tipo de violencia. Debemos generar una ciudad de respeto, una sociedad de respeto.

¿Qué busca la campaña?

Concienciación, educación sobre el respeto, generar desde el Municipio políticas públicas, trabajar con los profesionales que tratan estos temas. Esto porque cuando una mujer se atreve, como primer paso, a denunciar que ha sido violada, que ha sido agredida, el procedimiento no siempre es el adecuado y genera más traumas. Eso genera miedo a denunciar. Hace falta establecer un sistema judicial adecuado.

Pero ese no es rol del Municipio

No, pero me puedo reunir con el fiscal; he pedido una reunión con el ministro del Interior por todo lo que ha dicho del femicidio y por todo su trabajo. Yo alabo eso, porque aquí queda fuera cualquier bandera política y la función que uno ocupe. Aquí estoy para defender los derechos de las mujeres. No me callaré, así reciba críticas. Seguiré hasta el final.

¿Por qué dice no me callaré? ¿Siente que la están atacando?

Hay un grupo quizás muy conservador que me ataca. Respeto mucho su opinión, no me opongo, pero también pido que respeten. No todo lo que dicen siempre es la verdad. Aquí hay que generar conciencia y la campaña abrió el debate en la ciudad y eso es lo que quería.

Este esfuerzo no es nuevo en el Municipio. Se habló de acoso en el transporte y hubo campañas. ¿Se hizo el seguimiento al tema?

La administración anterior tenía la resolución sobre el transporte diferenciado (hombres y mujeres); pero ese es un tipo de discriminación, vivimos en una sociedad en la que hombres y mujeres estamos juntos. Esa resolución ya no existe. Vemos que el caos vehicular es alto en Quito, por lo que no podemos darnos el lujo de separar entre géneros. No es posible, tenemos que ser realistas. También estamos trabajando en una resolución sobre ciudades seguras, en los barrios con mayor índice de violencia.

¿Por qué utilizar la palabra ‘puta’?

Lamentablemente vivimos en una sociedad muy hipócrita. La palabra ‘puta’ está en la boca de todos los ciudadanos a diario; no solo de los quiteños, sino de los ecuatorianos. Porque ven un cartel con esa palabra se asustan. Dejemos la hipocresía a un lado y digamos las cosas como son. A quienes han reaccionado negativamente les respondo: por qué asustarse frente a una palabra y no por la violencia de género en el país. En Chimborazo, un hombre mató a su esposa embarazada y a su hijo de 3 años. Por qué no se alarman con lo que pasa.

¿El alcalde Mauricio Rodas está de acuerdo con esta campaña?

Esto no tiene nada que ver con el alcalde, con el Municipio. Mauricio Rodas respeta las libertades y los derechos. Yo supongo que él no se opondrá...

¿Hay recursos del Municipio en la campaña?

Nada. Todo ha sido con apoyo ciudadano, de quienes han querido contribuir, por ejemplo, Vinicio Carrillo o Fabián Mora. No son recursos muy grandes. Y si no hay apoyo económico, vendrán las otras actividades. El miércoles iremos con los familiares de Karina del Pozo (falleció en 2013) a poner la cruz rosada donde fue asesinada. La campaña es fuerte, pero hay que abrir los ojos ante la realidad.

La violencia de género tiene origen en el machismo. ¿Qué ocurre cuando una autoridad como el alcalde de Quito replica un rol tradicional y coloca a su esposa en el Patronato San José por ser su esposa? ¿No es eso conservadurismo?

Eso tendrían que preguntarle al alcalde de Quito. Como les digo, esta campaña es contra el femicidio, la violencia contra la mujer. Pero sí podemos ir más allá. Si una persona quiere hacer labor social, sea o no la esposa del alcalde, o la pareja de una alcaldesa, pues que ayuden. En ese sentido no le veo problema. Esto (de las primeras damas) ha sido una tradición, pero es un tema eminentemente municipal. Mi campaña es personal.

También hay instituciones que sostienen estructuras fundadas por el machismo como el concurso Reina de Quito, ¿cuál es su posición al respecto?

Comparto ese criterio. Creo que debemos cambiar la forma de ver a la mujer, no solo es belleza. La mujer es luchadora y valiente, por eso concuerdo con que la Reina de Quito cambie su connotación. Por qué no pensar en que un hombre trabaje en el ámbito social y no que sea una mujer la que exponga su belleza para hacerlo.

El aborto y el matrimonio gay también se debaten en la ciudad. ¿Se inscribe en esa corriente que defiende aquello como un derecho de la mujer y de los grupos LGBTI?

Son temas muy sensibles y es por eso que el Presidente ni siquiera los ha topado, porque en nuestra sociedad el impacto es fuerte. Estamos viendo que una palabra causa tanto efecto, más aún si en la Asamblea se legaliza el aborto o el matrimonio LGBTI.

¿Está a favor del aborto?

Son temas que los trato con mucha responsabilidad, creo que debemos partir de una consulta a los ciudadanos, a las mujeres, quizás muchas digan que no, pero quizás quienes han sido víctimas de una violación respalden esa línea.